julio 20, 2009

Soledad Senil

Entre parentesis...

Él esta sentado en la mesa del comedor, todos sentados a su alrededor: no lo miran. A sus años parpadea lento y sonrie con esas mejillas arrugadas a su hija que con delantal puesto, lava los platos de el almuerzo; entran niños corriendo y gitrando bajo la mirada de sus ojos cansados y felices. Entonces se para y se sienta en el único sillon grande del living sintiendo ese calor y esa sensacion de familia en el aire. Al despertar todo esta más obscuro, nadie en el living. Mira hacia la cocina y las cortinas estan cerradas. El lavaplato se ve vacio, ordenado, sin platos en el, y con la llave notablemente en mal estado. Las sillas de la mesa del comedor estan todas perfectamente ordenadas y sobre la mesa, un pintoso florero. Sus ojos expresan tristeza.

Se sienta en una banca frente a un parque y a su lado alguien que no se aprecia bien desde atrás; el sujeto extraño voltea su rostro y le dice: -Bello parque ah?

Fin.

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